Dormir bien es inversión en felicidad
Durante años nos hicieron creer que dormir mucho era de vagos. Pero en el Club del Buen Dormir estamos acá para desmentir ese mito: descansar bien no es perder tiempo, es ganarlo.
Mientras dormís, tu cuerpo hace mantenimiento: repara músculos, ordena recuerdos, regula el ánimo y prepara energía para el día siguiente. Es como una puesta a punto diaria, pero con la ventaja de que no tenés que hacer nada, solo cerrar los ojos.
Y aunque parezca increíble, dormir poco no solo te deja de mal humor: también afecta la concentración, la piel, el apetito y hasta el humor (sí, ese que te desaparece cuando no dormís bien).
Por eso en el Club decimos que dormir bien es invertir en felicidad. Un buen descanso te vuelve más productivo, más creativo y, sobre todo, más amable con vos mismo y con los demás.
Así que la próxima vez que alguien te diga “¿otra siesta?”, podés responder con orgullo:
“No, una inversión emocional.” 😴💸
Bienvenido al Club del Buen Dormir.